Diversidad sexual y procesos de socialización de la sexualidad que se llevan a cabo en la escuela.
La diversidad sexual esta sujeta a un marco cultural definido en cada sociedad, es un fenómeno muy reciente creado por la sexología nacido como una perversión, aludiendo a esta última como una desviación a los comportamientos sexuales “normales” basados en una pilar heterosexual.
A través de los años la diversidad ha sido percibida de distintas formas según el cristal con que se mire, pues esta sujeta a el conocimiento, plasticidad y tolerancia personal, interpersonal, institucional y cultural de la sociedad en que se desarrolle.
Existen varias posturas de la diversidad desde Parafilias1 hasta una sexualidad adulta polimorfa, ésta ultima no es patológica como la primera. Por lo que se entiende y descubre un doble discurso de los propios peritos en el tema.
La descentralización de la heterosexualidad ha sido uno de los factores más importantes que permitió el desarrollo de la diversidad sexual, ya que conlleva a un a aceptación de la homosexualidad como sexualidad humana estándar, lo que no implica un cambio radical en el pensamiento chileno, pues de todas maneras se tiende a mantener un género e identidad sexual dentro de los rangos ordinarios.
Los hechos que apoyan esta descentralización son: las influencias de los países del Norte que poseen políticas en contra de la discriminación referida a las distintas orientaciones sexuales de sus ciudadanos y ciudadanas; el quiebre entre reproducción y sexualidad femenina apoyada por tecnologías reproductivas que controlan las tasas de natalidad y morbidez femenina; y el soporte que contribuyen las ciencias sociales - humanas al desarrollo y preservación de las minorías sexuales.
Los minorías sexuales se abren paso gracias a diversos factores como el hecho de ser bastantes en número e ir en aumento, una distribución geográfica concentrada en sectores específicos, poseer adversarios claros con quienes establecer una lucha por sus derechos, obtener cambios en la posición social de la minorías sexuales evocadas a estatus alto y una dirección concreta dirigida por objetivos intelectuales. A demás la clasificación abierta de cada individuo (auto-definición), dependiente de su biografía, que si bien es dúctil busca una estabilización de su identidad para permanecer a un grupo, lo que le proporciona comodidad, seguridad y afirmación.
Para establecer políticamente esta diversidad se necesita combustible, dado justamente por estos grupos.
La diversidad sexual requiere la proscripción de la discriminación de las orientaciones sexuales atípicas, homofobia cultural y un cambio en la socialización de la masculinidad.
Contextualizando en Chile, la discriminación en un hecho fuertemente marcado en nuestra sociedad y se refleja en el menosprecio, distinción, restricción o una preferencia injusta basada en un modelo arbitrario de sexualidad por instituciones y/o individuos con un juicio de que estas personas atípicas sexualmente son inferiores y que atentan contra el derecho de igualdad fundado en un modelo inflexible cambios sociales.
La educación formal e informal construida sobre un currículo concreto y oculto es el transporte de la cultura. La socialización en los establecimientos dependiente del nivel parvulario, básico o medio, y me atrevería a decir superior; estereotipa a los individuos sexualmente atípicos provocando un conjunto de creencias que derivan en actitudes sin juicio previo y un descontento generalizado por los heterosexuales (sexualmente típicos) hacia los gays, lesbianas y bisexuales.
Estas relaciones intrapersonales, interpersonales e institucionales provocan el los niños hostilidad, temor, odio, opresión, juicios y discriminación referida a las subculturas sexuales que no conocen, lo que llamamos Homofobia Cultural. Lo que provoca a largo plazo en los futuros usuarios e integrantes de la sociedad, normas sociales rígidas que no respetan a las minorías.
Esta discriminación se observa más claramente en los hombres puesto que estamos fundados en una sociedad patriarcal, por lo que la virilidad y la hombría definen a un HOMBRE en forma natural y social respectivamente.
El futuro hombre debe demostrar lo que será con actitudes para ganarse el respeto y honor de sus congéneres en sus relaciones sociales desde simples juegos hasta afectivas (amistades).
Según Conell el genero esta embebido en las disposiciones institucionales mediante las cuales funciona la escuela que establece diversos roles como relaciones de poder, división de roles entre docentes y estudiantes, patrones de emociones que deben expresarse de cierta forma si se es niño o niña, reglas de cómo sentir que se prenden a figuras de autoridad que encuentra como obstáculo la homosexualidad.
En las escuelas es una traba para el trabajo transversal de las orientaciones sexuales, pues los profesionales de la educación son preparados bajo un modelo único heterosexual, enmarcado en una sociedad machista. Agregando a eso la educación que tuvieron estos profesionales en sus hogares y sus marcados eje ético – morales, con una formación valórica que es difícil cambiar cuan se es adulto. Con el agravante que sigue siendo la minoría la que es flexible al cambio y el resto todavía visualiza la homosexualidad como algo patológico y anormal.
Por otro lado los docentes no pueden trabajar en este cambio solos, si los padres de los niños se desligan de su rol de padres ocho horas cinco días a la semana con la jornada escolar completa y se preocupan del trabajo y no de sus hijos; olvidando que es su tarea transmitir cultura, conocimientos y actitudes puesto que la figura paterna y materna tiene una aceptación directa por los niños pequeños.
Los estudiantes del resto de los niveles que tienen su identidad construida pasaron por lo mismo en que están sus sucesores...
La escuela como institución toma un rol protagónico en la preparación de la aceptación de las diversas orientaciones sexuales apoyado por los programas de estudio. Y los profesores son los mediadores entre la institución y el individuo estudiante.
1 Las Parafilias (atracciones desviadas) en su expresión extrema son desviaciones socialmente inaceptables de las normas que rigen tradicionalmente las relaciones sexuales. Merck Sharp & Dohme. Manual Merck. España. Océano; cap 87, pág 438.
La diversidad sexual esta sujeta a un marco cultural definido en cada sociedad, es un fenómeno muy reciente creado por la sexología nacido como una perversión, aludiendo a esta última como una desviación a los comportamientos sexuales “normales” basados en una pilar heterosexual.
A través de los años la diversidad ha sido percibida de distintas formas según el cristal con que se mire, pues esta sujeta a el conocimiento, plasticidad y tolerancia personal, interpersonal, institucional y cultural de la sociedad en que se desarrolle.
Existen varias posturas de la diversidad desde Parafilias1 hasta una sexualidad adulta polimorfa, ésta ultima no es patológica como la primera. Por lo que se entiende y descubre un doble discurso de los propios peritos en el tema.
La descentralización de la heterosexualidad ha sido uno de los factores más importantes que permitió el desarrollo de la diversidad sexual, ya que conlleva a un a aceptación de la homosexualidad como sexualidad humana estándar, lo que no implica un cambio radical en el pensamiento chileno, pues de todas maneras se tiende a mantener un género e identidad sexual dentro de los rangos ordinarios.
Los hechos que apoyan esta descentralización son: las influencias de los países del Norte que poseen políticas en contra de la discriminación referida a las distintas orientaciones sexuales de sus ciudadanos y ciudadanas; el quiebre entre reproducción y sexualidad femenina apoyada por tecnologías reproductivas que controlan las tasas de natalidad y morbidez femenina; y el soporte que contribuyen las ciencias sociales - humanas al desarrollo y preservación de las minorías sexuales.
Los minorías sexuales se abren paso gracias a diversos factores como el hecho de ser bastantes en número e ir en aumento, una distribución geográfica concentrada en sectores específicos, poseer adversarios claros con quienes establecer una lucha por sus derechos, obtener cambios en la posición social de la minorías sexuales evocadas a estatus alto y una dirección concreta dirigida por objetivos intelectuales. A demás la clasificación abierta de cada individuo (auto-definición), dependiente de su biografía, que si bien es dúctil busca una estabilización de su identidad para permanecer a un grupo, lo que le proporciona comodidad, seguridad y afirmación.
Para establecer políticamente esta diversidad se necesita combustible, dado justamente por estos grupos.
La diversidad sexual requiere la proscripción de la discriminación de las orientaciones sexuales atípicas, homofobia cultural y un cambio en la socialización de la masculinidad.
Contextualizando en Chile, la discriminación en un hecho fuertemente marcado en nuestra sociedad y se refleja en el menosprecio, distinción, restricción o una preferencia injusta basada en un modelo arbitrario de sexualidad por instituciones y/o individuos con un juicio de que estas personas atípicas sexualmente son inferiores y que atentan contra el derecho de igualdad fundado en un modelo inflexible cambios sociales.
La educación formal e informal construida sobre un currículo concreto y oculto es el transporte de la cultura. La socialización en los establecimientos dependiente del nivel parvulario, básico o medio, y me atrevería a decir superior; estereotipa a los individuos sexualmente atípicos provocando un conjunto de creencias que derivan en actitudes sin juicio previo y un descontento generalizado por los heterosexuales (sexualmente típicos) hacia los gays, lesbianas y bisexuales.
Estas relaciones intrapersonales, interpersonales e institucionales provocan el los niños hostilidad, temor, odio, opresión, juicios y discriminación referida a las subculturas sexuales que no conocen, lo que llamamos Homofobia Cultural. Lo que provoca a largo plazo en los futuros usuarios e integrantes de la sociedad, normas sociales rígidas que no respetan a las minorías.
Esta discriminación se observa más claramente en los hombres puesto que estamos fundados en una sociedad patriarcal, por lo que la virilidad y la hombría definen a un HOMBRE en forma natural y social respectivamente.
El futuro hombre debe demostrar lo que será con actitudes para ganarse el respeto y honor de sus congéneres en sus relaciones sociales desde simples juegos hasta afectivas (amistades).
Según Conell el genero esta embebido en las disposiciones institucionales mediante las cuales funciona la escuela que establece diversos roles como relaciones de poder, división de roles entre docentes y estudiantes, patrones de emociones que deben expresarse de cierta forma si se es niño o niña, reglas de cómo sentir que se prenden a figuras de autoridad que encuentra como obstáculo la homosexualidad.
En las escuelas es una traba para el trabajo transversal de las orientaciones sexuales, pues los profesionales de la educación son preparados bajo un modelo único heterosexual, enmarcado en una sociedad machista. Agregando a eso la educación que tuvieron estos profesionales en sus hogares y sus marcados eje ético – morales, con una formación valórica que es difícil cambiar cuan se es adulto. Con el agravante que sigue siendo la minoría la que es flexible al cambio y el resto todavía visualiza la homosexualidad como algo patológico y anormal.
Por otro lado los docentes no pueden trabajar en este cambio solos, si los padres de los niños se desligan de su rol de padres ocho horas cinco días a la semana con la jornada escolar completa y se preocupan del trabajo y no de sus hijos; olvidando que es su tarea transmitir cultura, conocimientos y actitudes puesto que la figura paterna y materna tiene una aceptación directa por los niños pequeños.
Los estudiantes del resto de los niveles que tienen su identidad construida pasaron por lo mismo en que están sus sucesores...
La escuela como institución toma un rol protagónico en la preparación de la aceptación de las diversas orientaciones sexuales apoyado por los programas de estudio. Y los profesores son los mediadores entre la institución y el individuo estudiante.
1 Las Parafilias (atracciones desviadas) en su expresión extrema son desviaciones socialmente inaceptables de las normas que rigen tradicionalmente las relaciones sexuales. Merck Sharp & Dohme. Manual Merck. España. Océano; cap 87, pág 438.